¿El harina de maíz se echa a perder?
¿Una dieta sin gluten consiste en harina de maíz, verdad? Y ¿por qué no iba a ser así, si este alimento orgánico es fácil de preparar? Pero, ¿se echa a perder la harina de maíz? ¿Y cómo se debe almacenar a largo plazo? Estas son las preguntas más frecuentes sobre la harina de maíz. En este artículo, abordaré estas interrogantes de manera detallada.
¿La harina de maíz se echa a perder?
Permíteme comenzar diciendo que la harina de maíz pierde su sabor, textura y color con el tiempo. Sin embargo, la rapidez con la que esto ocurre depende de cómo la almacenes. Cada paquete de harina de maíz viene con una fecha de caducidad, por lo que almacenarla más allá de esa fecha implica algunos cambios. Estos cambios incluyen la pérdida del sabor dulce natural de la harina de maíz. Incluso los aceites naturales y puros presentes en la harina de maíz, que actúan como conservantes naturales, tienden a volverse rancios, lo cual afecta el sabor.
Cuando almacenas la harina de maíz de manera adecuada, especialmente en frascos y recipientes herméticos, esta conserva su color y textura. Sin embargo, si decides almacenarla en el embalaje original y la dejas en la despensa durante un año, debes esperar algunos cambios drásticos. Es en este momento cuando surge la pregunta: ¿la harina de maíz tiene manchas negras?
La respuesta es sí, por supuesto.
¿Cuál es la vida útil de la harina de maíz?
Nuevamente, la respuesta a esta pregunta depende de cómo decidas almacenar la harina de maíz. Por lo general, la harina de maíz viene en bolsas de plástico, de papel o en recipientes de cartón. Este tipo de envases tiende a afectar la frescura del alimento, permitiendo la entrada de insectos y humedad, lo que puede llevar a la formación de moho y bacterias. Por lo tanto, es importante y necesario transferir la harina de maíz a frascos de vidrio o recipientes herméticos para su almacenamiento. La tapa sellable de estos frascos y recipientes ayuda a mantener la humedad, los insectos y otras sustancias dañinas fuera de la harina de maíz.
Si decides almacenar la harina de maíz de esta forma, esta se mantendrá fresca durante al menos 2-3 años. ¿No es impresionante?
¿Cómo almacenar harina de maíz a largo plazo?
Entonces, ¿la harina de maíz se echa a perder? Sí, al igual que cualquier otro alimento perecedero. Y eso es inevitable. Pero aquí puedes controlar la duración de su vida útil. La forma más eficiente de aumentar la vida útil de la harina de maíz es deshaciéndote del embalaje original.
Debe almacenar la harina de maíz en frascos de vidrio sellados y recipientes herméticos. ¿Sabes por qué? Es porque el embalaje original permite la entrada de contaminantes que provocan la presencia de harina de maíz enmohecida. Por lo tanto, es mejor almacenarla en frascos y recipientes propios del hogar. Pero no olvides revisar la fecha de caducidad de la harina de maíz. Está justo ahí en el envase.
Luego puedes colocar la harina de maíz en el refrigerador o en el congelador para su almacenamiento a largo plazo. Congelar la harina de maíz se considera una excelente manera de preservarla durante un año. Cada vez que desees usar la harina de maíz congelada, solo debes sacar la cantidad que necesitas. Someter la harina de maíz congelada a cambios frecuentes de temperatura tiende a estropear todo el lote. Y si no deseas refrigerarla o congelarla, eso también está bien.
Puedes almacenar la harina de maíz en un recipiente hermético en la despensa. Muchas personas utilizan hojas de laurel para mantener la harina de maíz fresca durante más tiempo. Colocar algunas hojas en el interior del frasco ayuda a mantener alejados a los gorgojos y las polillas. Incluso el ajo ofrece el mismo efecto, pero deja un aroma y sabor más fuertes.
¿Cómo saber si la harina de maíz tiene insectos o si se ha echado a perder?
Cuando la harina de maíz se vuelve incomestible, puede tomar diversas formas. El exceso de humedad provoca el desarrollo de moho, por lo que en estos casos obtienes harina de maíz enmohecida. Y a veces, incluso puede causar fermentación. Por lo tanto, es importante que estés atento a estas señales y deseches la harina de maíz una vez que las detectes.
La harina de maíz es un grano integral, ¿verdad? Eso significa que contiene grasa. Y donde hay grasa, existe la posibilidad de que se vuelva rancia. Sin embargo, cuando almacenas este alimento de manera adecuada, ralentizas ese proceso. La harina de maíz rancia tiende a desprender un olor desagradable y un sabor amargo.
La contaminación por insectos es otro problema de deterioro cuando se trata de la harina de maíz. No solo son el moho y los insectos los que causan daño, también los insectos producen el mismo efecto. Cuando detectas huevos en pequeños bolsillos de granos o cuando la harina de maíz tiene un aspecto polvoriento o tiza, sabes que no está bien.
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